La Identidad del Creyente en Cristo
En Cristo somos hechos nuevos. Aunque las personas nos vean iguales por fuera, la realidad es que por dentro Dios nos ha transformado: nos ha dado un nuevo corazón, una nueva mente y una nueva identidad. El apóstol Pablo recuerda a los creyentes en Corinto que lo viejo ha pasado y lo nuevo ha venido. ¡Qué verdad tan maravillosa, que en Cristo ya no somos quienes éramos antes, sino una nueva creación para la gloria de Dios!